Los beneficios de la práctica del yoga

Los beneficios de la práctica del yoga

Practicar yoga siempre es bueno. Las prácticas yóguicas son una panacea para todos, aunque desgraciadamente, en Europa hemos importado solo una pequeña porción de lo que es realmente el Yoga, sobrevalorando las Asanas físicas en detrimento de un enfoque más holístico, el verdadero Yoga (Unión en sánscrito) y que también tiene en cuenta la meditación, las técnicas de relajación, la dieta, la formación del carácter, ...

El yoga es una práctica física que también tiene grandes efectos en el aspecto psicológico de quien lo practica, con la respiración y las posturas adecuadas, tanto hombres como mujeres se beneficiarán en muchos aspectos de la vida.

La práctica del Yoga de las Asanas es, ante todo, una gran herramienta para purificar el cuerpo, tanto por el movimiento interno que "sufren" los órganos, como por la respiración equilibrada y el aumento de la sudoración.

 

En el caso de las mujeres, la práctica del yoga también es particularmente útil para equilibrar cualquier desarmonía hormonal y para disminuir los síntomas relacionados con el ciclo menstrual, tanto antes como durante y después. Se sabe que los practicantes de yoga reducen el dolor menstrual, mejoran la regularidad y disminuyen los síndromes premenstruales.

 

Para los hombres, suele ser más recomendable una práctica de yoga más intensa, como el Ashtanga Yoga o el Jivamukti Yoga, ya que son una combinación perfecta de tono muscular, actividad física, respiración y tranquilidad.

 

En los últimos años, la ciencia también se ha ocupado del yoga, tratando de entender cuáles son los beneficios para quienes meditan y qué ocurre durante la práctica del yoga.

Lo que ocurre en nuestro sistema está relacionado principalmente con la consecución de un estado de bienestar físico y emocional. El estado de nuestro sistema nervioso central cambia y mejora. Podemos relajarnos, se suspenden los procesos de pensamiento lógico y racional, se regenera la energía física del cuerpo como después de un sueño profundo, se reactiva todo nuestro sistema y campo energético: aura, chakras y meridianos.

En general, somos más propensos a la autoconciencia y a la autoobservación.

 

¿Cuáles son los beneficios después de haber practicado yoga?

Estaremos más alerta, más centrados, con ideas más claras, pensamientos más sencillos y mayor facilidad de concentración. Seremos menos propensos al estrés y a sus efectos en nuestra mente y en todo nuestro organismo. Disminuiremos los síndromes depresivos y tendremos un impulso en nuestro sistema inmunológico.

Tendremos mayor serenidad y estabilidad interior, lo que reducirá los niveles de ira, ansiedad, depresión y fatiga. Tendremos un mejor rendimiento físico y mental. Lograremos un mayor bienestar y armonía interior, lo que tenderá a armonizar poco a poco nuestras relaciones.

Muy útil en el embarazo si se realiza en compañía de un experto que sabrá indicarnos qué es bueno practicar en cada etapa de la gestación. Existen, según el caso, y según el grado de formación de la embarazada, periodos más o menos largos de suspensión de ciertas posturas o pasos, porque podrían ser peligrosos o perjudiciales, pero en general el Yoga es una de las mejores prácticas para acompañar los 9 meses de embarazo.

En toda Europa hay cursos de yoga específicamente diseñados para mujeres embarazadas y también para madres que acaban de dar a luz; en muchos casos, son clases en las que las madres pueden llevar a sus recién nacidos para practicar juntos.

La respiración será una de las herramientas más útiles de la práctica yóguica a tener en cuenta durante el parto.

A menudo me preguntan si el yoga puede ser útil en el tratamiento de las psicopatologías.

La primera respuesta es que el yoga es bueno para todo.

Ciertamente, las personas ansiosas encontrarán beneficios en el aprendizaje de técnicas de respiración que por sí solas pueden calmar o prevenir incluso los peores ataques de pánico.

Las personas más deprimidas encontrarán en la práctica física una saludable producción de endorfinas que les devolverá el tono y las ganas de actuar.

Además, en muchas posiciones de yoga hay figuras que "trabajan" los aspectos fundacionales del individuo, como la relación con la madre y el padre, un ejemplo es el Jivamukti Yoga.

Luego hay posturas para reconectar con la Madre Tierra, técnicas de enraizamiento, que serán muy buenas para las personas que sufren de depresión, pero también para las que necesitan volver a centrarse.

La práctica en sí es un excelente ejercicio de organización y constancia para los procrastinadores empedernidos.

En última instancia, pues, el yoga es una práctica que lleva a las personas a estar en el aquí y el ahora, lo cual es muy importante para quienes intentan luchar contra los miedos, las fobias y los pensamientos intrusivos que llenan la mente.

La respiración en las prácticas yóguicas es también una excelente herramienta para volver a vivir en el presente, no en las ansiedades del futuro o la depresión del pasado, sino en el ahora, en el instante preciso en que estoy respirando.